La importancia del río Cabriel en la comarca Utiel-Requena - #LoMásCurioso
El caudal permitía regar huertas y mover maquinaria
Inés Romero. Requena 13/04/2020
Seguro que ha pasado un día de verano con amigos o familiares bañándose en las aguas del Cabriel. Pues debe conocer que este río, que nace en la Sierra de Albarracín y desemboca en el río Júcar en Cofrentes, es una de las arterias hidrográficas más importantes de la Comarca Requena-Utiel. Desde 1851 traza el límite político entre la comarca y la Comunidad de Castilla-La Mancha.
El Cabriel, mucho más que un río
Las aguas del Cabriel son de gran calidad, debido a que su cauce pasa por zonas muy poco pobladas y nada industrializadas. Esto ha dado lugar a que el río Cabriel sea un espacio natural de gran interés medioambiental, geográfico y paisajístico.
El 17 de octubre de 1995, Castilla-La Mancha declaró la Reserva Natural de las Hoces del Cabriel; el 17 de junio de 2005, la Generalitat Valenciana proclamó el Parque Natural Hoces del Cabriel que integra parte del término de Venta del Moro, Requena y Villargordo del Cabriel; y el 19 de junio de 2019, la UNESCO declaró el Valle del Cabriel como reserva de la Biosfera compuesto por los municipios de Vete del Moro, Villargordo, Caudete de las Fuentes y parte de Requena.
La arquitectura del agua del Cabriel
El Cabriel tuvo una importante arquitectura del agua, pues se aprovechaba su caudal para regar huertas y mover maquinaria como molinos, batanes y martinetes. Así pues, hasta la mitad del siglo XX, las comarcas más cercanas al Cabriel estuvieron pobladas, con caseríos y aldeas que actualmente están deshabitadas o hay muy pocos habitantes.
En 1878 la Junta de Gobierno de la Acequia Real del Júcar le realizó al río Cabriel una inspección. El arquitecto Antonio Martorell reconoció un total de 45 presas, 18 molinos harineros con 53 piedras, 5 batanes, un martinete laminador de hierro y cobre en Contreras y 15 norias y ruedas hidráulicas. Además, el elemento fundamental de la memoria fueron las presas, las cuales se encontraban (y muchas de ellas se encuentran) a lo largo del Cabriel con el objetivo de retener el agua que aprovechaban las acequias, caces, norias, molinos, etc.
Los molinos harineros
Jorge Haba tenía previsto construir un molino harinero de tres ruedas muy cerca de la finca de La Noria, aguas arribas de la aldea de Casas del Río, en la partida del Hondón al margen derecho del río. Sin embargo, al parecer el molino no se construyó.
Aguas abajo, junto a la aldea de Casas del Río, Antonio Martorell en 1878 puso el nombre a los dos molinos cuyas ruinas aún se conservan: el molino harinero de Cuéllas de dos piedras y el molino harinero del Conde de Torrellano o del tío Pedro de una piedra, aunque más tarde fue de dos. Y junto a estos, sus famosas norias.
Centrales eléctricas y presas
En el siglo XX se construyeron las primeras centrales eléctricas y, posteriormente, la gran presa de Contreras.
FUENTES
ARGILÉS GÓMEZ, Vicente. “Molinos, batanes, lavaderos y otros usos del agua en nuestra comarca”. Oleana, 2007, n. 21, 2007, p.323-378 p.
LATORRE ZACARÉS, Ignacio. “1878: Arquitectura del agua en el Cabriel”. Oleana, n. 21, 2007, p. 121-142. Disponible en: http://www.requena.es/sites/default/files/Departamentos/cultura/publicaciones/oleana/Oleana21/21_09arquitecturaaguacabriel1878_ilatorre.pdf
LATORRE ZACARÉS, Ignacio. “De cuando Casas del Río pasó de Cofrentes a Requena (1871-1874)”. En: Casas del Río: fiestas en honor a la Virgen de la Asunción del 1 al 15 de agosto de 2012, Año 24, n. 24, 2012, [4] p.
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